El Basket Quintanar consiguió una contundente victoria en Albacete, derrotando al CABA en su propia cancha por una diferencia de 20 puntos, y con una buena imagen mostrando superioridad de principio a fin.

 

Se trataba de un derbi con algunos ex del CABA en las filas visitantes como el pívot Luis Verdeguer o el entrenador Jordi Casas, mientras que en el banco local Alfredo también fue técnico Quintanareño. Muchos aficionados quintanareños se desplazaron hasta Albacete, mereciendo mucho la pena el viaje por lo que pudieron presenciar.

 

Con esta victoria el Basket Quintanar sigue en plena lucha por entrar en la fase de ascenso, situado a tan solo una victoria del cuarto clasificado a pesar de contar con un partido menos disputado, el que tendrá que disputar ante el otro conjunto de la capital albaceteña: el club cinco.

 

Ya desde el inicio los quintanareños, muy bien dirigidos por el nuevo base francés Laurent Gomis, tomaron distancia en el marcador marchándose con una renta a favor de once puntos al final del primer cuarto. En el segundo acto, siguió la superioridad y los visitantes quisieron sentenciar el encuentro, pero pese a que llegaron a rozar los veinte puntos de diferencia, tres triples consecutivos de los albaceteños en los dos últimos minutos antes del descanso, permitieron a estos seguir metidos en el encuentro con la diferencia de doce puntos (31-43)

 

El tercer cuarto fue jugado a cara de perro por ambos conjuntos y se vivió en la pista la tensión típica de un derbi donde todos se conocen de memoria en un continuo intercambio de canastas, muchas de ellas de tres puntos de los locales, que buscaban así reducir la diferencia pero que solo pudieron dejarla en once puntos (51-62) y todo por decidir en el último cuarto.

 

Pero en el último cuarto, el Quintanar volvió a sacar el rodillo y arrolló al CABA con un baloncesto muy superior y con acciones individuales extraordinarias como las que protagonizó Kiko Mas que fue muy superior a los hombres altos locales logrando incluso un mate por encima de las torres que puso en pié al pabellón. Al final veinte puntos de diferencia 72-92 en un gran partido del Basket Quintanar ante uno de los rivales directos en la lucha por entrar en la fase de ascenso.